así seguimos

así seguimos
Siempre al lado de "los lobitos buenos"

sábado, 22 de enero de 2022

EL TACTO ESTREMECIDO de PABLO MALMIERCA

 

En este blog, https://mori-bundia.blogspot.com/2020/, ahora tristemente casi abandonado, y con fecha 24 de febrero de 2020, aparecía un texto titulado: “Del desgarramiento hegeliano al compromiso moral con el oficio poético”, en el que daba cuenta de mis impresiones sobre LA VOZ ESTREMECIDA (Eolas, 2019), el primer libro de poemas de la Trilogía del Estremecimiento de Pablo Malmierca. 

Ahí y con el recuerdo a sus anteriores trabajos  indicaba: “aquello que en su primer libro dD estaba al lado del “desgarramiento hegeliano”, es decir, “del encuentro de sí mismo con la verdad que pretende buscar” y que le llegaba  desde  las múltiples presencias de lo psicológico, o aún más, de todo aquello que rondaba los mundos de la psiquiatría; […] a la postre y afortunadamente se iría decantando [en sus siguientes poemas] hacia el lado de lo moral”. Pues bien, en la acertada segunda entrega de esta Trilogía, Pablo Malmierca recoge la idea, que ya apareciera en su segundo libro NO COMAS MI CORAZÓN (PiEdiciones, 2017), de fundir la Poética con la Ética; hecho que le lleva a continuar buscando desde lo moral la voz necesaria y el lugar propio del poeta en esa “voz estremecida” donde la poesía de este autor aparecerá de nuevo como una mediación, como una metaxú, un “entre”, un “intermedio” del yo poético (la voz) y lo Otro poetizado, que busca su lugar a través ahora de EL TACTO ESTREMECIDO (Eolas, 2021).





Pero este “tacto estremecido” no va a consistir únicamente en la búsqueda de una mediación, sino, más bien una Salvación mediada a través del tacto y por el tacto que a veces recuerda a esa muerte salvadora que aparece en alguno de los últimos poemas de Casi una leyenda de Claudio Rodríguez. Ya en el Prólogo del libro, el poeta Rafael Saravia se va a referir a la urgencia de “Tocar para dejar de no-ser” y al hecho de que el poeta va a “realizar una punción magistral en el retorno de lo primitivo que nos hace humanos”. Esta forma de proceder generará una Metodología Poética bastante novedosa mediante la cual Pablo Malmierca va a utilizar una especie de práctica al estilo antiguo del llamado LINGCHI oriental; esto es, el “despiezado y mutilado de un cuerpo, por ejemplo el humano de la amada” para hacerse con él desde los versos, torturarlo y hasta causarle la muerte, pero, eso sí, una muerte salvadora desde la propia palabra poética y el ofrecimiento amoroso del autor.

No deja de ser curioso que este libro no esté dedicado a nadie en particular, lo que parece afirmar y reiterar la dedicatoria que hiciera al principio de la Trilogía y desde aquella “voz estremecida” al escribir: “A Cris, de ti nació la palabra que me nombra”, y así consolidar la hechura de la propia Trilogía.

Desde estos presupuestos quiero analizar un proceso poético en el que aparecen los versos como sucesivos cortes en cada uno de los órganos del cuerpo (o libro), a través de diferentes puñales, navajas o cuchillos poéticos; puñales del tacto que estremece, que van cortando y haciéndose a la piel a través del tacto presente en cada verso; por ejemplo, en el poema titulado “Nostalgia” donde leemos: “Herí / cada una de las partes de tu cuerpo, /tus cicatrices / son el recuerdo de días pasados”.

Otra de las claves fundamentales de este libro de poemas, siempre abierto, es la presencia continua del número tres, algo que no resulta novedoso si pensamos en los planteamientos hegelianos de esta propuesta poética y la vigencia de sus tres momentos en una cosmovisión dialéctica siempre sugerente, donde la Lógica, la Naturaleza y el Espíritu se entremezclan y buscan e indagan entre lo poético de forma cada vez más interesante. En este sentido además de la continua presencia de las tríadas, aparecen diferentes Trípticos entre otros muchos trípticos o tríadas continuas, a saber:

-Respecto de la Estructura:

            1. El libro de poemas visto como cuerpo.

            2. Los diferentes poemas vistos como diversos órganos.

            3. Los versos vistos como cortes en la piel desde el tacto

-Respecto del Desarrollo: Una nueva tríada que se desarrolla con la continua presencia del número 3:

            1. Tres partes del libro: Opiáceo/ El Otro / Salvación (por el tacto)

            2. Tres lugares / acciones

            3. Tres citas o epígrafes de entrada: “Un cuerpo encima de otro / ¿siente resurrección o muerte?” (Claudio Rodríguez) / “La creación es el tocar o el toque del ser en el mundo” (Jean Luc Nancy) / “Sabéis lo que es la sensibilidad suspendida […] ese lugar aterrante.” (Antonin Artaud)

-Presencia continua de número 3 para conformar desde los versos la búsqueda de una SALIDA ya desde el inicio del libro: “Nada siento / Nada sé / Nada soy”; o más adelante en el poema “Inquina”: “Si nada fuese verdad, / si los abrojos no cortaran tu carne, / si la inquina no oxidase tus días.”. Esta vigencia de lo numeral en forma de tríada se repetirá en muchas ocasiones en los diferentes poemas hasta el poema final en el que la salvación a través del tacto se reitera desde la enumeración trimembre de la acción: “Busqué el abrazo de tus ramas/ encontré la pureza de tu savia, / escucho fecundo y renovado”

-Conviene destacar también la importancia del ENTRE poético y dialéctico que ya apareciese en libros anteriores como “Lugar de nadie”, y “del OTRO”, donde se refleja la parte más moral del libro.

- Respecto del Lenguaje que se utiliza, conviene destacar que cada vez son más escasos los adjetivos, cuestión que aviva lo conceptual y la acción poética; es decir, aparece una mayor presencia de los sustantivos y los verbos a través de un vocabulario plagado de referencias naturales y científicas centradas en lo botánico, lo mineralógico y lo geológico. Resulta muy característico también en la poesía de Pablo Malmierca la continua confrontación de los posesivos mis/tus.

- Por último me atrevería a asegurar que podría haber dos libros en uno, guardando coherencia poética y ternaria entre ellos para dar un Tercero compendiador llamado EL TACTO ESTREMECIDO:

1.      Formado por los poemas largos / Exteriores (cortes)

2.      Formado por poemas cortos y más reflexivos / Interiores (cortes)

3.      El tacto estremecido, LINGCHI poético, formado por la unión de todo.

Para terminar estas pequeñas reflexiones quiero recordar que en el comentario que mencionaba al principio sobre su libro anterior, escribíamos: “Termina La voz estremecida con una contundencia definitoria y abierta a partir de los Números y las Cenizas en busca de nuevos Estremecimientos, o lo que es lo mismo si jugamos con el lenguaje, “Extremecimientos” o mecimientos extremos desde la palabra poética necesaria”. Y esto mismo sucede con EL TACTO ESTREMECIDO desde donde quedamos a la espera de la tercera y última parte de esta Trilogía Estremecida en la que nos meceremos al ritmo álgido de los nuevos y sugerentes versos de Pablo Malmierca.

 

                                                                                  LUIS RAMOS DE LA TORRE

No hay comentarios:

Publicar un comentario