Desde luego las patatas con costilla que nos acabamos de comer, no tienen nada de crítico comensal ni de star-cuisine.
Así que, ¡nos aproveche!
De momento, quiero recordar con vosotros aquel libro de "recetas poéticas" para niños, que con el título "De semilla de manzana" escribi hace unos años:
Mientras tanto, os dejo uno de los poemas del libro que allí aparecían, "Para quienes se ven gordos":
¡Que te ves gordo y pesado!
¡Que tu sombra te lo cuenta!
De aliento de nube, cinco,
de blanco de lis, cuarenta,
de flores de espliego, doce
y quince ramas de menta
Añádanse levemente
entre veinticinco y treinta
granos de sal. De alegría
mucho más de mil noventa
y cuidado con la mezcla
al beber si se calienta.
Recuérdese una manzana
porque brilla que alimenta
con esos carrillos prietos
que parece una tormenta
de salud. Luego procura
inventar que a quien inventa
le es igual sombra y figura
que mida más de la cuenta.
¡Ojalá que en alegrías
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